miércoles, 4 de septiembre de 2013

Teenage Dream (Capítulo 8)

N/A: Hola mis queridos amigos! :) So, aquí estamos... estrenamos mes, y por tanto toca un nuevo capítulo de esta mi historia. En fin... tenía pensado subirlo antes pero entre las vendimiadoras (que por cierto, lo gordo llega ahora) y un desafortunado accidente que costó la vida a mi tía abuela, la cual para mí era como una abuela, el pasado viernes últimamente estamos que no estamos... En fin, que me voy por los cerros de Úbeda... 
--
Before you met me, I was a wreck but things were kinda heavy, you brought me to life now every February you'll be my valentine, valentine...


Capítulo 8: "Come What May"

La sensación de soledad que le invadía le hacía sentirse mal, mareado, sin aire... Miró a su alrededor intentando tranquilizarse pero con cada vista se sentía más y más angustiado, el dolor de la pérdida, la impotencia, la necesidad de volver atrás en el tiempo... 
Si hubiera un método para volver atrás en el tiempo, si pudiera volver a ese momento, a ese lugar, esa última noche con su Blaine, a ese último beso...
Suspiró armándose de valor, y levantó su azul mirada a aquel pulido mármol, la angustia, la frustración, las ganas de llorar y no poder encontrar ni una lágrima más, el dolor, todos esos sentimientos que se arremolinaban en su corazón ante la burlesca mirada del mármol ante él... 
"Blaine Devon Anderson, 1995-2012, amado hijo y hermano"
Las lágrimas con las que tan fuertemente había luchado para no dejar escapar fluyeron libremente de sus ojos, enturbiando su entorno.... 
Hacía demasiado tiempo que no venía por aquí, demasiado tiempo que le había llevado aceptar tan trágica noticia, y sin embargo aquí estaba... 
Secando las saladas lágrimas de su porcelánico rostro, depositó un beso en la hermosa rosa que estrechaba entre sus manos, depositándola cuidadosamente delante del que durante más de tres años había sido el hogar donde descansaba el amor de su vida, su otra mitad...
Cooper levantó la vista hacia el joven angustiado ante él, le había llevado años, aceptar la muerte de su hermanito, le había llevado años aceptar que ya nada sería igual, que Blainey nunca regresaría, que la vida de todos había cambiado en un abrir y cerrar de ojos, que la salud mental de Kurt pendía de un hilo, del que temía que un día se rompería...
Suspiró con frustración, al fin y al cabo era culpa suya todo lo que había pasado en los últimos años, la muerte de Blaine, los años de Kurt en aquel agujero infernal llamado sanatorio, la depresión en la que todos se habían sumergido, e incluso venir aquí... si no hubieran venido a...- un golpe en la puerta interrumpió la línea de pensamientos del mayor, haciéndole fruncir el ceño ante el sonido, pues no esperaba a nadie... 
Con un encogimiento de hombros abrió la puerta; -¡¡¡PAPI!!!- exclamó una pequeña voz, haciendo al actor de ojos azules el hombre más feliz de la tierra. -¡Blainey!- exclamó este, estrechando entre sus brazos al pequeño.
-Hey, hey... ¿qué pasa?- Se escuchó decir a otra voz - ¿Para mí no hay beso o qué?- Preguntó la voz de nuevo, Cooper levantó la vista para encontrarse con su esposa, quien vestía esa dichosa camiseta de AC/DC que tanto le gustaba haciéndola verse extremadamente guapa. 
Levantando al pequeño Blaine en brazos se acercó a ella, besando acaloradamente sus labios, y suspirando con felicidad al tiempo que terminaba de besarle. 
-¡Vaya!- exclamó la joven de pelo rizado con una sonrisa evidente en su rostro. - Ya veo que nos has echado de menos- terminó de decir, mirando a su alrededor buscando con la mirada a Kurt, quien siempre se alegraba con la visita del pequeño de la familia. 
La joven posó su preocupada mirada en la figura encorvada en el pequeño sofá de la sala, quien parecía tener un sueño muy agitado, para volver a mirar a su marido con preocupación.
El joven de ojos azules suspiró, mirándola con una mezcla de preocupación y casi alivio, -Lleva así desde ayer... dice que vio a Blaine, que está vivo, que estábamos equivocados, y que algún día nos vamos a arrepentir por no hacerle caso...- explicó este al borde un ataque de nervios, la joven se acercó a él, abrazándolo, -Coop, ¡por qué no vas a dar una vuelta por la playa?-  preguntó esta mirando a su marido -A Blainey le encantará y a ti te vendrá bien desconectar un poco- Terminó con una cálida sonrisa dirigida a su esposo, quien aún sostenía al pequeño en sus brazos.
Aceptó a regañadientes, y ahí estaba él, en un pequeño pueblo costero, en un soleado día de febrero de la mano de lo mejor que ha hecho en toda su vida, su hijo, paseando por el paseo marítimo que a estas horas estaba abarrotado de gente, dulces niños que juegan al pilla-pilla, adorables ancianos que pasean juntos de la mano...
Fue un momento, solo un momento, y sin embargo en ese dichoso momento había perdido a lo más importante del mundo, miró a su mano derecha, esa que antes sostenía el pequeño Blaine, y que ahora estaba vacía. 
Los nervios le invadieron, había perdido a Blaine, había perdido a otro Blaine, por segunda vez en su vida... -¡BLAAAAAINE!-Gritó- ¡BLAAAAAINEEEY!- volvió a gritar, esta vez emprendiendo una improvisada carrera por los lugares más cercanos a la última vez que había visto al pequeño de ojos miel.

-¡BLAAAAAINE!- Se oyó una voz gritar, haciendo al joven de rizos azabaches encogerse un poco por la sorpresa. Miró a su alrededor, pero no encontró la fuente de la voz, suspiró y volvió a apoyar la cabeza sobre sus rodillas, dejándose vagar por su línea de pensamiento... No sabía cuanto tiempo se había tirado pensando cuando escuchó un sonido indescifrable cerca de él, movió la cabeza para hacer frente al pequeño sonido, asombrándose al observar que se trataba de un pequeño niño de rizos negros que lloraba desconsoladamente.
El joven al ver esa escena ante él sintió algo removerse dentro de él, sabía perfectamente lo que se siente al estar perdido, era algo que en ocasiones sentía... -Hola, perqueño- susurró cerca del niño para no asustarle - ¿Te has perdido?- preguntó, esta vez sintiendo la preocupación llenarle el pecho -Hey, pequeño, ¿estás bien?- preguntó esta vez arrodillándose delante del niño, el pequeño apartó la mano que tenía delante de sus ojos, hipando un poco -Quiero a mi papá- dijo, volviéndose a echar a llorar, esta vez abrazándose al hombre ante él.
El muchacho se sorprendió un poco, pero le devolvió el abrazo al niño, intentando ofrecer un poco de comodidad ante esta situación... -Shhh, lo sé, lo sé, cielo- calmó al niño, como muchas veces había hecho su hermano con él. -Pero.. para encontrar a tu papá debo saber como se llama...-Terminó de decir el joven Johnnie, intentando razonar con el niño. 
El niño le miró como si le hubiera crecido una segunda cabeza, -Mi papá se llama papá...- dijo el pequeño como si esto fuera la cosa más simple del mundo, haciendo al mayor sonreír levemente. -Bien... en ese caso... ¿como te llamas, campeón?- preguntó el muchacho, secando uno de los tantos rastros de lágrimas que manchaban la pequeña carita del niño. 
-Hola, me llamo Blaine y tengo estos años- dijo el niño con una sonrisa orgullosa mientras mostraba los cinco dedos de su mano derecha. - ¿Y tú? ¿Cómo te llamas?- preguntó el niño con una mirada curiosa en sus ojos. 
Por segunda vez en menos de cinco minutos, el moreno sonrió, sintiendo su corazón derretirse ante la simpatía del pequeño en sus brazos, -Soy John- se presentó el joven, aún sonriendo, -Pero todos me llaman Johnnie- terminó estrechando la pequeña mano del niño. 
-Johnnie... tengo miedo...-susurró el niño apoyando su cabeza en el hueco del cuello del joven- ¿Y si nunca más encuentro a mi mamá y a mi papá?- preguntó, haciendo un pequeño puchero con el labio, intentando por todos los medios no llorar, pero fallando miserablemente.
-Blaine, tranquilo, pequeño... te prometo que encontraremos a tu papá y a tu mamá- prometió el joven intentando tranquilizar al pequeño.
Se quedaron así, el pequeño abrazado fuertemente en el pecho del joven, quien intentaba por todos los medios consolar al niño, perdiendo la noción del tiempo. 
-¿Johnnie?-preguntó el pequeño, rompiendo el silencio de la solitaria playa. -¿Uh?-preguntó el joven, mirando interrogante al niño, quien ahora le miraba directamente a los ojos. 
-¿Me cantarás una canción?- preguntó -Mamá siempre me canta una canción de AC/DC antes de ir a dormir o a veces cuando tengo miedo... y papá siempre me canta "Come What May" de mi película favorita...-explicó el pequeño, haciendo sonreír al joven que se había encariñado con él minutos antes. 
-¿Te gusta "Moulin Rouge"?- preguntó el moreno, sonriendo más ampliamente al sentir la pequeña inclinación de cabeza del niño sobre su pecho. -Mi papi y yo la vemos todos los domingos... mi papá siempre se pone un poquitín triste porque era la película favorita del tío Blaine...- explicó el niño, poniéndose un poco triste al pensar en su papá. 

Never knew I could feel like this 
Like I´ve never seen the sky before 
I want to vanish inside your kiss


Comenzó a cantar dulcemente, lo que pareció calmar el llanto del niño, quien escuchaba atentamente desde su lugar en los brazos del muchacho. 

Seasons may change, winter to spring 
But I love you until the end of time 

Come what may 
Come what may 
I will love you until my dying day 

Suddenly the world seems such a perfect place 
Suddenly it moves with such a perfect grace 
Suddenly my life doesn´t seem such a waste 
But our world revolves around you 
And there´s no mountain too high 
No river too wide 
Sing out this song I´ll be there by your side 
Storm clouds may gather 
And stars may collide 
But I love you until the end of time 


Come what may 
Come what may 
I will love you until my dying day


Las últimas letras de la canción resonaban haciendo al joven sentir una mezcla de sentimientos arremolinándose en su corazón, tristeza, dolor, perdida... Sentía como si ya hubiera cantado esta canción con un gran amor del que le es difícil recordar. Sintió el calor de algunas lágrimas derramar de sus ojos miel. 
-¿Johnnie?- preguntó el pequeño haciendo al muchacho salir de sus pensamientos.
-¿Sí, pequeño?- preguntó el moreno, secando los últimos restos de lágrimas de sus ojos. 
-¿Por qué lloras?- Preguntó el niño curioso- ¿También te has perdido?- volvió a preguntar el pequeño con un atisbo de preocupación en su voz. 
John no pudo evitar reír ante la curiosidad del niño, quien definitivamente ya se había ganado todo su cariño, -No, no... no me he perdido...- respondió el muchacho, acariciando los rizos del pequeño todavía en sus brazos... -No, yo.. solo pensaba...- terminó de decir mirando al niño, quien asentía con la cabeza en conformidad a la respuesta del joven. 
-Bien, pequeño, creo que va siendo hora de buscar a tu papá o a alguien que nos pueda ayudar a ello- comentó el joven, bajando de sus brazos al pequeño y cogiendo la mano de este, disponiéndose a andar hacia fuera de la playa. 
Estaban a medio camino del paseo marítimo cuando sintió al niño soltarse bruscamente de su mano para verlo correr, instantes después hacia un hombre moreno de aspecto angustiado.
-¡PAPI!- Gritó el niño, abrazándose al hombre, quien le recogió en sus brazos abrazándole fuertemente y besando cada centímetro de su cara, con alivio. 
-¡Blainey! ¡Oh, Dios mío, Blaine!- Exclamó el padre angustiado- Pensé que te había perdido para siempre- terminó de decir, llorando. 
-Papi, lo siento... yo solo quería ir a coger un par de conchas para hacer más feliz al tío Kurt- se disculpó el pequeño, sacando unas cuantas conchas del pequeño bolsillo de su pantalón y mostrándolas a su padre, quien solo se limitó a seguir llorando de alivio. -Tranquilo, papi... Johnnie me ha ayudado a buscarte, y encima me ha cantado Come What May... -explicó el pequeño con orgullo presente en su voz. 
Cooper Anderson levantó la vista hacia el amable hombre que había ayudado a su hijo a encontrarlo dispuesto a expresar su gratitud, sin embargo, todos sus agradecimientos y palabras murieron en su garganta, allí, ante él, se encontraba la persona a la que habían llorado durante casi diez años...
Un silencio sepulcral invadió el momento, alivio, asombro, dolor e incluso algo de miedo invadió el corazón del actor.. su Blaine.. su hermanito estaba allí.. estaba allí y tenía miedo de parpadear y que todo fuera un espejismo, una falsa ilusión...
El silencio fue roto por el joven de pelo rizado, quien atónito miró al hombre ante él...
-¿Cooper?- 
--
TO BE CONTINUED....

N/A2: En fin, aquí está el capítulo, espero que os haya gustado (por favor, me encantaría saber vuestras opiniones) y bueno, disculpad el retraso.. ya he dicho que la vida va últimamente un poco loca... en fin...¿Cual será la reacción de Cooper ante esto? Para saber solo tienes que leer el próximo capítulo.. xD
¡MUCHÍSIMAS GRACIAS POR LEER! 

--
La letra de la canción es de la fabulosa película Moulin Rouge espero que os guste tanto como a mí me gusta, pues es una de mis películas favoritas...
Os dejo por aquí la canción cantada por nuestro querido Darren (Blaine) y nuestro querido Chris (Kurt), espero que os guste! ;) 


¡NOS VEMOS EN LA SIGUIENTE ACTUALIZACIÓN! :D 






No hay comentarios:

Publicar un comentario